Para lograr un material de aluminio para tapas termosellable y de fácil apertura (pelabilidad) se aplica un coating desarrollado especialmente para el material que compone el envase rígido que contiene al producto.
Son posibles aplicaciones específicas o múltiples (de acuerdo al envase a tapar), con resistencias especiales de acuerdo al producto, la condición de envasado,etc.
En reemplazo de aluminio puede usarse papel o poliéster como material de tapa.